El perfil de efectos se refiere a la variedad de efectos producidos por los distintos cannabinoides presentes en la planta de cannabis. Al igual que las notas en un xilófono, cada cannabinoide emite efectos únicos que contribuyen a la experiencia global del usuario. Por ejemplo, el cannabidiol (CBD) puede tener propiedades relajantes, mientras que el tetrahidrocannabinol (THC) puede generar efectos psicoactivos. Esta metáfora resalta la complejidad y diversidad de los cannabinoides, que, al combinarse, crean una composición de efectos que pueden ser modulados para adaptarse a las preferencias individuales y necesidades terapéuticas de los consumidores de cannabis.