La vaporización es un método de administración de cannabidiol (CBD) que consiste en calentar el producto a una temperatura que permite la generación de vapores sin llegar a la combustión. Este proceso proporciona una forma rápida y eficiente de inhalar el CBD, ya que los vapores inhalados se absorben directamente en los pulmones y ingresan rápidamente al torrente sanguíneo. La vaporización es apreciada por su capacidad para proporcionar efectos casi instantáneos, a la vez que evita los subproductos de la combustión asociados con métodos tradicionales de consumo, como fumar, lo que la hace una opción más saludable.