El cannabidiol (CBD) ha demostrado tener aplicaciones médicas y de bienestar gracias a sus propiedades antiinflamatorias, analgésicas, ansiolíticas y anticonvulsivas. Se ha convertido en un aliado valioso en el tratamiento de condiciones como el dolor crónico, la ansiedad, la epilepsia y otros trastornos neurológicos. Además, se ha investigado su potencial en el manejo del estrés, el insomnio y otras preocupaciones relacionadas con el bienestar mental. Aunque la investigación continúa, los usos terapéuticos del CBD han ganado popularidad como una alternativa natural para la gestión de diversas afecciones. Esto ha contribuido a su aceptación creciente tanto en la atención médica como en la comunidad de bienestar, brindando una opción natural y eficaz para muchas personas.