La psicosis cannabinoide es un efecto secundario poco común, pero posible, asociado principalmente con dosis elevadas de THC, el principal cannabinoide psicoactivo en el cannabis. Se caracteriza por alteraciones temporales en la percepción, el pensamiento y el estado de ánimo. En algunos casos, el THC puede desencadenar síntomas psicóticos en individuos susceptibles, como paranoia o alucinaciones. Es importante destacar que la mayoría de los consumidores de cannabis no experimentan psicosis cannabinoide, y esta reacción adversa suele estar vinculada a factores genéticos y predisposiciones individuales. La evaluación minuciosa de estos riesgos es esencial para garantizar un consumo responsable y consciente.