El tetrahidrocannabinol (THC) es el principal cannabinoide psicoactivo presente en la planta de cannabis. Es conocido por su capacidad para inducir efectos psicotrópicos en los consumidores, siendo responsable de la sensación de «colocón» o euforia que se asocia comúnmente con el consumo de cannabis. Además de sus efectos psicoactivos, el THC también posee propiedades analgésicas y puede tener aplicaciones medicinales en ciertos contextos. Sin embargo, su uso tanto recreativo como médico está condicionado a consideraciones legales y de salud, dado que puede generar efectos secundarios y riesgos potenciales.